EL ARDOR DE LA SANGRE

 

El ardor de la sangre

‘El viento de otoño silbaba entre los árboles y por momentos el entoldado parecía oscilar, casi como un barco. Visto desde fuera, desde la oscuridad, aquel espectáculo tenía algo extraño y triste. No sé por qué. Quizá por el contraste entre la naturaleza inmóvil y la agitación de la juventud. ¡Pobres chicos! Se lo estaban pasando en grande. Sobre todo ellas: aquí las educan tan severa y castamente…’ (Pág. 29)

El ardor de la sangre es una novela corta que transcurre en un pequeño pueblo de Francia en la década del 30.

Presentada como una tranquila localidad en la que nada interesante sucedía, comienzan paulatinamente a vislumbrarse pequeños acontecimientos que darán la pauta de que dicha tranquilidad no era tal. En este contexto, una misteriosa muerte comienza a desatar importantes sucesos vinculados con la pasión que caracteriza a la juventud, ese ‘ardor de la sangre’ al que la autora hace referencia.

Relatado en tercera persona, desde Silvio, un personaje que parecería secundario en los inicios de la historia, se van presentando los hechos desde la mirada de un aburrido hombre de edad avanzada y sin descendencia, a quien sólo le queda esperar la llegada de su inminente muerte.

‘la manera en la que un hombre bebe en compañía no tiene ningún significado; pero cuando lo hace a solas revela, sin que él lo sepa, el fondo mismo de su alma. Hay un modo de hacer girar el vaso entre los dedos, una manera de inclinar la botella y mirar cómo cae el vino, de llevarse el vaso a los labios, de sobresaltarse y dejarlo bruscamente en la mesa cuando te llaman, de volver a cogerlo con una tosecilla afectada, de apurarlo cerrando los ojos como si se bebiera olvido a tragos, que es la de un hombre intranquilo, agobiado por las preocupaciones o por un terrible problema’ (Págs. 71-72)

El libro, compuesto de pequeños fragmentos, invita al lector a realizar un recorrido por la misteriosa villa francesa del siglo pasado, descubriendo los secretos de las diferentes familias y comprendiendo la pasión de la juventud, que ha marcado tanto la vida de los diferentes protagonistas de la historia.

Se trata de una novela atrapante y conmovedora que da un giro inesperado hacia el final, participando al lector en la complicidad de los sucesos que comienzan a revelarse uno a uno como una fila de dominó.

Lo que no podía prever es el fuego que encendería, ni que la ceniza aún caliente, seguiría quemándome el corazón después de tantos años’ (Pág. 133)

Helga Fourcade

  • El ardor de la sangre
  • Irene Némirovsky
  • Salamandra
  • Año 2004
  • 145 páginas
  • ISBN 978-84-9838-129-0